¿Nuestros sentidos perciben la realidad objetivamente o simplemente hacen una interpretación subjetiva de la misma? ¿Quién nos asegura, por ejemplo, que al ver una paloma es ésta realmente como la perciben nuestros ojos? Pudiera ser diferente en la realidad, y nuestro sentido de la vista estar diseñado para plasmar en nuestro cerebro una imagen que es interpretación subjetiva de la paloma, pero no lo que es en realidad. Pudiera ocurrir lo mismo con los olores, los sonidos, los sabores y los contactos que perciben nuestros sentidos.
No existe la manera para comprobar que lo que perciben nuestros sentidos es la realidad “real” ya que todos los seres humanos percibimos lo mismo, una interpretación. Es decir hay dos mundos: el de la realidad y el de la percepción que hacen de ella nuestros sentidos. Y mientras no se pueda comprobar que el mundo real y el que percibimos son iguales, existirá siempre la gran duda, ya que no hay un “juez” neutral que vea las dos “realidades”.
Lo anterior explicaría por qué las personas que han experimentado encuentros cercanos del tercer tipo ven a los extraterrestres como seres horribles. No ven de ellos lo que realmente son, ya que sus órganos de los sentidos son incapaces de hacer una copia exacta de la realidad. Ven de ellos lo que entre nosotros equivale al esqueleto. De ahí que la gran mayoría de esos seres que nos visitan adquieran una estructura corporal que nuestros sentidos sean capaces de interpretar como la nuestra.
Es una hipótesis: los órganos de los sentidos de los seres humanos fueron diseñados para percibir la realidad de una manera diferente a como “realmente” es. Esto nos indicaría que hemos estado, y lo estaremos por siempre, engañados. ¿A quién le interesa que no conozcamos la realidad objetivamente, como realmente es?
Sin querer inducir a nadie a nada, sino a título puramente informativo, analicemos diferentes puntos de vista, respecto de este tema:
No existe la manera para comprobar que lo que perciben nuestros sentidos es la realidad “real” ya que todos los seres humanos percibimos lo mismo, una interpretación. Es decir hay dos mundos: el de la realidad y el de la percepción que hacen de ella nuestros sentidos. Y mientras no se pueda comprobar que el mundo real y el que percibimos son iguales, existirá siempre la gran duda, ya que no hay un “juez” neutral que vea las dos “realidades”.
Lo anterior explicaría por qué las personas que han experimentado encuentros cercanos del tercer tipo ven a los extraterrestres como seres horribles. No ven de ellos lo que realmente son, ya que sus órganos de los sentidos son incapaces de hacer una copia exacta de la realidad. Ven de ellos lo que entre nosotros equivale al esqueleto. De ahí que la gran mayoría de esos seres que nos visitan adquieran una estructura corporal que nuestros sentidos sean capaces de interpretar como la nuestra.
Es una hipótesis: los órganos de los sentidos de los seres humanos fueron diseñados para percibir la realidad de una manera diferente a como “realmente” es. Esto nos indicaría que hemos estado, y lo estaremos por siempre, engañados. ¿A quién le interesa que no conozcamos la realidad objetivamente, como realmente es?
Sin querer inducir a nadie a nada, sino a título puramente informativo, analicemos diferentes puntos de vista, respecto de este tema:
